Vete a volar con UP

Este fin de semana tuve la disyuntiva de ir al cine a ver Wolverine o Up. Pero mientras de la película de Guepardo no tuve muchas referencias buenas ni aquí ni en el mundo "real" (la única buena fue de una chica que me dijo que Hugh Jackman salía encuerado pero no recordaba la historia...), en el caso de la producción de Pixar ya sabía que me encontraría con algo muy superior.
La peculiaridad de las cintas de Pixar es que aunque su meta es el público infantil, suelen tener un fondo que los adultos también disfrutamos. Vamos, no son simplonas historias de princesas y soñadores del Disney clásico.
En el caso de Up, la película no se va por el camino de lo fácil. Si hay gags, si hay muchos chistes, persecuciones aventuras, animales exóticos, absurdos, Russell es un dolor en el trasero pero a la vez el típico torpe de gran corazón y no, no hay número musical.
Al salir del cine me quedó la impresión de que:
a) La película es más disfrutable para un adulto que para un niño, sobre todo porque la historia del señor Carl Fredricksen no es tan "soft" e involucra ciertas perdidas, resignaciones y metas.
b) Los complejos de Cinemex sirven Kit-Kat caduco.
c) Uno de los villanos tiene la voz de Giobany, igualita. No voy a decir cual, veanla y se acordarán del Gio.
Para no spoilear la trama, sobre todo en aquellos que la quieran ver, solo me queda reconocer que es un peliculón, que es un deleite visual (aunque ya no hay nada particularmente asombroso) y que el guión camina más firme que en trabajos anteriores de Pixar (incluso Wall•E). Alto recomendable y recuerden: ¡Ardillas!