Flashpoint

¿Qué pasaría si pudieras modificar algo en tú pasado? Si pudieras cambiar una sola acción, salvar a alguien que amas. ¿Lo harías? Esa es la pregunta sobre la que está construida la trama de Flashpoint, la megasaga que, sin que nadie lo esperara, terminó por cambiar todo el Universo DC hasta sus mismos cimientos.
Yo no comencé a comprar esta historia porque pensara que iba a ser importante. La verdad solo lo hice por el dibujo de Kubert, de quien me declaro un fan irredento, y porque me estaba gustando el tratamiento que se le había dado a Flash en los últimos años. Pero el paso de los números fue mostrando que podía llevarnos a un punto interesante...sin que me pasara por la cabeza que ese punto era tirar la continuidad por la borda. DC decidió que la historia sería el preciado botón de "reset" que había estado buscando por años.
La historia comienza con Flash (Barry Allen) despertando en su oficina en lo que parece ser un día normal. Pero pronto descubre que toda la realidad, tal como la conocía, ha sido modificada de forma brutal. Wonderwoman y Aquaman se encuentran en una guerra que ya destrozó a Europa y que amenaza con convertirse en una conflagración mundial. Abin Sur jamás murió y sigue siendo el Linterna Verde de la Tierra (aunque con poco interés por ella). El héroe máximo de Estados Unidos es Cyborg, mientras que nadie conoce a Superman y la Liga de la Justicia jamás existió. Ciudad Gótica es un paraíso del juego, algo así como Las Vegas, con un aspecto más tétrico, pero claro, tiene a Batman...aunque no se parece mucho al Batman que conocemos. Y Flash....Flash no tiene poderes. La Speedforce parece no existir.
Si leíste La era de Apocalipsis, te darás una idea de cómo va la historia. Un futuro distópico donde solo un hombre (Allen) recuerda las cosas como deberían ser y trata de descubrir como regresar a la normalidad. Claro que en el camino, Flash se va a encontrar con sorpresas agradables y desagradables. Desde que su madre está viva, hasta que varios de sus mejores amigos están muertos.
Flashpoint llegó sin prometer gran cosa. Después de la resaca de Final Crisis y Blackest Nigh, el Universo DC se encontraba en plena reforma y tratando, sin éxito, de involucrar a los lectores en sus historias. En la empresa comandada por Dan Didio, todas las sagas importantes en los últimos  años (Identity Crisis, Infinite Crisis, Final Crisis, Batman RIP) habían tratado de servir como elementos para modificar la continuidad, sin éxito, siempre. DC padeció en la última década una especie de crisis existencial. Por un lado, están orgullosos de ser "La" editorial con mayor antiguedad dentro de los títulos mainstream. Por otro, toda su historia hacía que sus personajes se sintieran perpetuamente viejos.
Entonces llegó Flashpoint, que prometía ser más que nada un evento de Flash y terminó triturando toda la continuidad anterior del Universo DC. No es una gran historia de lejos (muy al estilo Johns, se va cayendo número a número), presentra pocas vueltas de tuerna interesantes y tiene el enorme defecto de que hay cosas importantes que se cuentan en los tie-ins.
Por otro lado, si sirvió para finalmente empujar al Universo DC en una nueva dirección. Eliminó el anquilosamiento de la "vieja continuidad", y ahora todo pasa por primera vez, por lo que no tenemos que andar caminando sobre 70 años de historia para descubrir porqué los calzones de Superman son rojos. En primera instancia, esto significa que muchas grandes sagas jamás pasaron, aunque los editores y guionistas de DC han dicho que esto no es así y algunos hechos si quedan tal como se narraron antes (como The Killing Joke).
Esta saga llega a México un tanto tarde, editada por Televisa, presentando solo la historia principal y descartando todos los tie ins. Sin ningún tipo de extra (como se caracteriza Televisa en todos sus productos), Flashpoint es un cómic que merece la pena una ojeada, aunque dado que ya nos encontramos con los "Nuevos 52", no es imperdible. Ideal si eres completista...o fan de Kubert.