Con todos lo elementos listos y un arranque prometedor (gracias a los dos Oscar ganados por el Laberinto del fauno), presagiaban una noche memorable. Sin embargo, toda la fiesta quedó en promesa.
A partir de ese momento las votaciones juegan contra Del Toro que pierde el Oscar, que muchos ya daban por hecho, en la categoría de Mejor película extranjera ante la alemana La vida de otros.
Un filme más para quien la noche se tornó amarga fue Children of the Men, del mexicano Alfonso Cuarón, que cayó derrotada en las tres categorías en las que compitió (Mejor edición, fotografía y guión original).
Y finalmente González Iñárritu, cuya Babel sólo gana en Mejor música con Gustavo Santaolalla pero es barrida por Los infiltrados en Mejor película y director.
La ceremonia gozó de momentos graciosos cortesía de Will Farrel y Jack Black en un número musical donde se burlaban de la Academia por preferir a los actores serios de los cómicos o a Ellen Degeneres y su deseo de tomarse una fotografía al lado de Clint Eastwood (el seleccionado para tomar la instantanea fue ni más ni menos que Steven Spielberg).
Pero el buen semblante con el que los mexicano arrancaron, se fue borrando, y ninguna payasada, chiste o canción, borró la amargura de los directores de Babel, El laberinto del fauno y Los niños del hombre. Todo quedó en una promesa.
lunes, febrero 26, 2007
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