sábado, diciembre 10, 2011

Fear Itself 4

La Serpiente sigue haciendo de las suyas por todo el Globo Terráqueo, y al sembrar el terror entre todo el mundo, sus fuerzas van en aumento, eso sin contar con la gran ayuda que le prestan sus "cosechadores de miedo" al mantener ocupados a los héroes.
Los Vengadores apenas se están reponiendo de la onda impresión de que Bucky se ha vuelto a morir, o eso pensamos, debido a las heridas que le provocó Sin. Steve Rogers decide dejar de lado su traje de gimnasta y decide regresar al puesto de Capitán América para combatir al mal amartillado.
Thor regresa a la Tierra (después de ser expulsado de Asgard como vil cholo sería sacado de un antro) y para su sorpresa todo el planeta es un caos, por lo que decide ir y confrontar cara a cara a la Serpiente, quien ha recuperado sus fuerzas y su juventud, siendo en esta forma muy similar a como yo veo a Ximensa Sariñana. También recupera su fortaleza, una especie de Castillo de Grayskull, pero menos gay, aunque también allí todos usan ropa demasiado apretada.
Iron Man decide ir a parlamentar con Odin. tony sabe que los dioses solo escuchan a los mortales cuando estos tienen "algo" que ofrecerle a las deidades, así que el empresario le da lo único que le queda con valor: Su sobriedad. Si, Stark se pone a pistear para que un dios le hable y como suele pasar, el dios accede. Odín escuchará al Hombre de Hierro.
El encuentro entre Thor y la Serpiente se salda rápido, y me recuerda mucho a lo que alguna vez vimos en los Caballeros del Zodiaco, pues lo teletransporta a otro lado porque lo enfada.
Los Vengadores restantes mientras tanto tratan de detener a Sin, quien sigue vandalizando Washington, en tanto que Thor cayó en Nueva York y se enfrentará a las versiones amartilladas de Hulk y The Thing. Una batalla de proporciones dragonbollescas está por comenzar.
CRÍTICA: Mientras que en otras megasagas me ha parecido que nunca pasa nada, en Fear Itself está ocurriendo todo al mismo tiempo, tanto que la mayor parte de las subtramas se diluyen. Tenemos por un lado a la Serpiente rejuveneciendo como Mayin Boo con la maldad, tenemos del otro lado a Sin destruyendo la capital de Estados Unidos, tenemos el drama del Capitán América, tenemos a los "elegidos" para cargar los martillos, tenemos la novela de Odín-Thor, Iron Man de borracho y a los habitantes de Broxton que una vez más ven como su pequeña ciudad (877 veces más grande que Colima) se ve envuelta en una batalla de monos greñudos y todo eso.
En algún punto esta historia se ha vuelto tan confusa que temo que Fraction caiga en las usuales taras que ha caído Bendis en sus megasagas pasadas, dejando cosas sin resolver (ejemplo: Echo, que vimos por última vez en Secret Invasion, ¿se quedó desmayada 8 meses en Tierra Salvaje, o qué?), y lo digo porque ya hemos llegado al Ecuador de la historia y se siguen abriendo nuevos argumentos.
Por el lado visual no hay quejas. Stuart Immonen es un crack que ha mejorado de una forma brutal, con una narrativa que trata de poner orden en el caótico guión.
CALIFICACIÓN: 8

2 comentarios:

león X dijo...

Me gustó más que el número anterior y las subtramas son entretenidas pero es una saga muy rara.

Raxel dijo...

Siento que está muy desordenada, hay muchas cosas sin concluir y por lo que he leído, todo este nórdico relajo seguirá después de FI, cuya moraleja es: para hablar con los dioses debes de estar ebrio