Norman Osborn tiene al mundo a sus pies y quiere acabar con los héroes más molestos a su juicio. Pero hay uno en especial que no pone en peligro sus planes pero que si quiere eliminar por puro placer: El Hombre Araña.
Por su parte, Spider Man sabe que ha tenido varias oportunidades para acabar con el Duende primero y con Iron Patriot después y en todas ellas se ha equivocado de forma garrafal. Si alguna vez hubo una buena oportunidad para que Osborn acabara con el arácnido, es esta.
CRÍTICA: Aunque la lista no me ha traído muchos momentos buenos, si tiene algunos cómics que destellan con luz propia. Este one shot por ejemplo no es precisamente trascendente (aunque parece que si... no), sin embargo si es divertido, y mucho.
Primero cuenta con un sólido guión de Dan Slott que rescata la esencia humorística del arácnido (yo lo leí primero en inglés y me pareció mucho mejor, la traducción no es mala pero como todo lo de Televisa se siente sin alma real).
Donde el cómic despunta sobre la media es en el arte. Adam Kubert es uno de los dibujantes más capaces del medio y vuelve a derrochar clase en este cómics, con un par de splash pages bastante bien ejecutadas y una narrativa llevada de forma excelente. Aunque lo ubico mucho más por su trabajo en X Men, aquí despunta algunos buenos trazos de Spider Man, presentando sólidas secuencias de peleas e incluso haciendo interesantes las partes que no llevan otra cosa más que diálogo.
En resumen, un buen, buen cómic para cerrar el año. Lamentable claro que Giobany trajera esta edición sin la historia extra que presenta la versión gabacha, pero tampoco la pedimos con chongo cuando se trata de editorial Televisa.
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