Listos para el escape de África

Alex, Melman, Marty y Gloria siguen empeñados en hacer de su vida una gran aventura, sobre todo ahora que están en África, sin embargo ¿será la vida en la selva tan gratificante como en el zoológico de Central Park?

Algunos no están convencidos, y luego de estar varados en playas paradisíacas llega el momento de dibujar la estrategia para regresar a Nueva York, sobre todo porque el Rey Lemur está seguro que podrá conquistar la ciudad. Como probados estrategas, el comando de los pingüinos está listo para emprender el vuelo luego de reparar una aeronave y llegan... pero a las planicies africanas, la región más salvaje del contienente, y con ello una serie de nuevas pruebas para los carismáticos animales citadinos: la vida salvaje.
"Nos enamoramos de los personajes que creamos junto con Ben Stiller, Chris Rock, David Schwimmer y Jada Pinkett Smith (las voces en inglés de Alex, Marti, Melman y Gloria)", agrega el director y guionista Tom McGrath, quien también tuvo a su cargo la primera entrega del filme. "Exploramos el tema de la civilización en contraposición con la vida salvaje y presentamos una historia sobre la amistad de estos animales y cómo su relación se pone a prueba cuando regresan a la selva".

Peces fuera del agua

Los escritores colocaron a Alex en un punto medular de su vida: reencontrarse con sus padres, y se da cuenta de las diferencias que la geografía ha causado luego de que fuera secuestrado siendo un chachorro para llevarlo a un zoológico. Alex es el rey de Nueva York, pero en África las expectativas son diferentes, y en esta segunda parte se explora el significado de la familia y de la amistad.
"Pensamos que sería interesante continuar el relato de ‘pez fuera del agua’ cuando nuestros cuatro neoyorquinos entran en contacto con África, su tierra natal, el sitio al que pertenecen", menciona McGranth.
Para la cebra Marty, este viaje no explora las diferencias sino las similitudes. En el zoológico, la cebra más entusiasta siempre soñaba con vivir libre y cabalgar con su propia especie. Ahora, se le presenta la oportunidad. Pero los psicólogos saben bien que son las diferencias las que enriquecen al grupo.
Para poder hacer que los protagonistas se colocaran en una escenario que casi pudiera tocarse, los realizadores tivieron que vivir el clima y los colores de África en vivo; realizaron una visita a los lugares que llevarían a la pantalla grande, y si en la primera parte el gran reto fue crear una gran selva, ahora fue poner en juego a las diversas manadas en conjunto. "Nuestro cuarteto se encuentra con manadas de cebras, gran número de hipopótamos y una camada de leones. Nuestra preocupación principal fue que había muchos animales de diferentes tamaños. Todo era enorme... el cielo, los grupos de animales".

Simplemente neoyorquinos

Con la experiencia salvaje a cuestas, un autoconocimiento y redescubrimiento de la relación en la disfuncional y a la vez equilibrada familia de neoyorquinos, el productor señala que esta película es crucial en estos personajes. "Siempre serán neoyorquinos de allí salieron. Allí regresarán eventualmente. La interrogante es si se quedan en África o si regresan", señala el productor.
Mark Swift destaca en esta segunda parte, a tres años de que la primera entrega se convirtiera en un éxito, que los personajes logran madurar, y más allá de las interrogantes de cómo sería la vida fuera del zoológico, se dan cuenta que también son parte de un hábitat natural. "Alex descubre cómo puede ser fiel a sí mismo como un león en África. Marty convierte en realidad su sueño de cabalgar con una manada de cebras. ¿Pero cómo se siente cuando se convierte en uno más? Gloria experimenta su primera relación romántica, y Melman realiza que ha estado enamorado de Gloria desde siempre".